sábado, 11 de julio de 2009

Farewell



Pensaba no escribir nada.


El sólo hecho de no plasmar nada nuevo sería un indicio más que obvio del final de este blog.


Ciertamente esto que abrí un 17 de marzo, hace ya más de un año, terminó siendo algo que habría de marcar mi vida para siempre.


(Si alguien me hubiera dicho al inicio de esta simple pagina web que hoy día yo me encontraría en el lugar en que me encuentro y que iba a vivir todo lo que he vivido, sencillamente me hubiese reído con la muela de atrás!)


Debo agradecerle infinitamente y por siempre a este blog, este tecnicismo inerte formado por bytes de memoria y una URL en la red de Internet, el haber sido mi espejo, mi psicoanalista profundo, a través del cual externé mis sentimientos más intensos, elaborados, retorcidos y vistos desde un ángulo y una óptica diferente.


Esta bitácora atesora, de alguna manera, los momentos más importantes de mi vida hasta hoy. Fué un viaje largo y tortuoso, aunque con un final feliz, de experiencias y emociones nuevas expresadas entre líneas tanto en los versos cortos como en la prosa, sentimientos que quizás no los expresen las palabras sino lo que ellas evocan en mis recuerdos.


Gracias a los pocos que me leyeron, por seguirme en esta travesía personal.


A los muchos que no les gustó, les agradezco por igual.


Pero, sobre todos, le dedico esto a su principal lector, la persona más importante, alguien que, sin su agrado, no hubiera continuado con este blog...



Yo.





And, for you...



I hoped that someone would get my message in a bottle,



So I placed it on the beach, and let it go,


And it travelled all across the ocean, until someone special finally found it,


Then she came and gave it back to me,


On that magical down of december at the sea...



And then god blessed us with a shower,


And dressed the sky with it’s most beautifull colors,


And a rainbow above us sealed our fate,


And then I knew in my heart, for the very first time,



That my message always ment to be for you.



Alex G.

lunes, 23 de febrero de 2009

Good Times

...Te acuerdas, cuando éramos dos niños, dos carajitos, que jugábamos en la grama de aquella casa con el patio graaaande, que parecía infinito... te acuerdas? Que rodábamos por la grama, muertos de risa, que en un momento me quedé yo encima de tí, mirando tus ojos, tu boca, tú me mirabas, nos íbamos a besar... no sabíamos como.

Te acuerdas, tú, que salíamos del colegio, íbamos a tu casa, nos subíamos al techo a mirar el paisaje, tú y yo solos, sin atrevernos...?

Y tú, recuerdas el bachillerato, cuando en la fiesta, disimuladamente te agarré de la mano, sensualmente y tú, entre pícara y sonrojada me decías: Juaan, Juaan... te acuerdas?

Me acuerdo de tí en esas tardes, cuando salíamos de la universidad... tú vivías siempre cerca, siempre sola, siempre gitana, y yo me quedaba contigo en tu apartamento, en tu habitación... recuerdo como acariciaba tus piernas mientras hablabas... éramos como uña y carne...

Wow... y tú, tú misma!, recuerdas cuando te ví en el hospital?, te veía en cámara lenta cuando caminabas... esa silueta pequeña, diminuta, delgada, ese pelo largo y suelto, esas ínfulas de grandeza que te hacían ver gigante, y esa bata tan grande que te hacia parecer a Batichica...

Me acuerdo también de tí, cuando estaba anocheciendo, estabas en mi consultorio, sentada, aparentabas que leías mientras yo me acercaba cada vez mas, hasta que te robé ese beso... y me lo dejaste robar entero! Luego me acuerdo que te mudaste sola, independiente, en una habitación, y empezaste a trabajar... yo te esperaba afuera cuando salías, y nos íbamos por ahí... a comernos un sándwich, a comernos tu y yo... te acuerdas la fiebre que nos dió?

Recuerdas tú cuando, bailando, te dije que parecías una niña buena, y me dijiste con esa picardía... Buena?, yo no soy buena... yo soy mala! (y era verdad!), y las veces que te visitaba a tu casa, al consultorio, donde sea, sólo hacia falta acercarnos un poco, olernos un poco, solo un poquito, para perdernos irremediablemente en la pasión, como cuando casi rompimos el lavamanos del baño, o como cuando casi lo hicimos en la guagua de Metro?

Hoy me sentí un poco nostálgico, y empecé a recordar todas esas vivencias, todas distintas, personas distintas y épocas diferentes.

Alguien me dijo una vez que, al terminar una relación, me enfocaría primero en recordar todo lo malo que hubo durante esa experiencia pero que luego, con el paso del tiempo, cuando esa pasión se haya ido, empezaría entonces a recordar todos los momentos lindos vividos durante aquella experiencia, y que los recordaría con una sonrisa...

Ella tenía razón.

sábado, 14 de febrero de 2009

Amor y Paz.


...Fue lo que sentí en tus brazos, saboree en tus besos, aquella noche.
Es lo que me provocas cada vez que te escucho.
Es lo que añoro, es lo que busco en el horizonte cuando no estas conmigo.

Es la semilla que quedó plantada, que crece...





Llega un punto en la vida de un hombre donde uno mira hacia atrás, mira hacia delante, mira hacia los pies y ve donde está parado. Ahí uno respira profundo y reflexiona sobre que es lo importante en la vida.
Qué uno busca?, qué le hace falta a uno, después de este largo recorrido en la vida?
Después de caminar tanto... hacia donde voy?, realmente vale la pena este camino?



“Fue lo que sentí en tus brazos, saboree en tus besos, aquella noche..”

...que me puso a dudar, si el camino en que estaba era realmente el que quería, o debía oír a mi corazón, escuchar sus lamentos y finalmente complacerlo?
Aquella noche de ese año moribundo nació un sentimiento. Ese sentimiento ha ido creciendo a la misma velocidad con que se han desvanecido otros espejismos, otras metas que hoy no parecen mas que señales de humo , ilusas, vanas.
Entre tus brazos, respirando por tus besos, embriagado de tus ojos, y acariciado por tu voz, me di cuenta...



“Es lo que me provocas cada vez que te escucho”

Es lo que mueves en mí, es lo que calmas en mí, lo que me excita y lo que me hipnotiza... es, simplemente, la pieza que faltaba.
Es esa sensación, cuando te hablo, de que te conozco de toda la vida, es ese sentimiento reconfortante, que me hace sentir que todo va a salir bien, cuando siento tu voz.




“Es lo que añoro, es lo que busco en el horizonte cuando no estas conmigo”

La vida da tantas vueltas, tantas, que uno se marea buscando esa parte de uno, esa mitad, ese complemento que sabes que está ahí, en algún lugar, pero no lo ves. Y, cuando lo encuentras, te das cuenta que estabas buscando en el lado opuesto, en la dirección equivocada.
Hoy sé que esa parte de mí está lejos, pero no importa, porque ya la encontré, y está cerca, más cerca...



“Es la semilla que quedó plantada, que crece...”

El destino no es más que el plan de Dios en ejecución. Quien diría que esta semillita, que surgió de la nada, el verano pasado, rodaría por el tiempo y caería ese día, esa noche, esa madrugada, en un corazón fértil?

Por el mismo destino que antes, otra semilla, accidentalmente, cayó lejos, y cayó en tierra fértil, y hoy crece... y seguirá creciendo... dos historias, dos ejemplos de que la vida, como el amor, nacen... de una semillita que un día cayó.



Y así, este hombre, en la mitad del camino se detiene, mira hacia atrás, mira hacia delante y, esta vez, mira hacia dentro, hacia su corazón... y le pregunta hacia dónde.



Esta vez, el corazón le traza el camino...




Un camino nuevo...




De amor y paz...




...Hacia tí.





(...Para tí, mi G!)